domingo, 30 de diciembre de 2012

Por hoy...


Dejé escritas un par de líneas sobre las sábanas de tu cama. No dicen mucho, sólo lo necesario para que, ahora que vuelvas, descubras que las noches mitigan los dolores de los días cuando la ansiedad no aguanta.

Conforme pasan los minutos, la tinta se secará, al punto de resquebrajarse hasta que el viento de tu voluntad, decida borrar los trazos finos que con tanto cuidado osé marcar.

Volverás y verás la limpieza de tus sábanas, que dejarán un sabor nostálgico a tu gusto reservado. Mirarás las ventanas y preguntarás por dónde se han escapado los ecos de esa extrañeza momentánea.

Probablemente nuestros pasos nos pudieran llevar por el mismo camino, pero en un gesto adusto, tus sábanas me cuentan que te idealizo como si realmente algo en mí, de tí, valiera la pena. Y para tí, lo mismo.

¡Ay, tus sábanas liláceas! Tu cuerpo tibio, tu respiración entrecortada.

Se iluminan entre sus hilos las luces que nos vieron reflejados en interminables madrugadas; esas madrugadas que parecían volar como hojas secas emigrando a su última morada.

Se me oculta tu rostro tras el recuerdo de las sábanas impregnadas de otoño.

Me saboreo la efervescencia del tiempo vano, en lo inocuo de las miradas llenas de pesadas voces gritando, sin que realmente se les oyera.

Extrañar es degustar, con la memoria, lo que no se puede tocar con las manos. Migrarán las paredes a un desierto de palabras y así, cuando vuelvas, no verás más nada de mí. Sólo a tus pies, un tintero volcado.

Dame lo que te plazca, lo que quieras, pero nunca aquello que no tengas.

lunes, 24 de septiembre de 2012

...

Ocurre que de vez en cuando las palabras fluyen más rápido de lo que puedo escribirlads o decirlas.
Entre cuatro paredes y una ventana que más que un escape, parece la más grande prisión, le doy vueltas a asuntos que no se pueden resolver y que nunca tomaron el curso hacia el cierre de un círculo.
Me deshilacho.
Pero sólo poquito.
¿Que por qué me deshilacho? Porque lo mío es la costura y lo relacionado.
Y deshilacharse es más común de lo que ustedes se imaginan.

viernes, 21 de septiembre de 2012

Un día (casi) cualquiera.


"Si no puedes ver el humor en las cosas, sería mejor que te murieras".
—David Bailey

En la vida, las cosas tristes no piden permiso, sólo entran sin tocar. Entran como el polvo: por las ranuras, por las ventanas, por las chapas. Entran atoradas en los zapatos y enredadas en el cabello. Hagas lo que hagas, entran.

La felicidad es eso que no escuchas llamando a tu puerta, mientras tratas de evitar que las tristezas entren por la fuerza.

Así que sonríe, sé feliz mientras puedas y cuanto quieras. No pelees con lo que te acongoja o te hace sentir débil. Lo feo es volátil, sólo se queda un rato y, como polvo, para alojarse necesita de corazones flojos a los que no les importe convertirse en miserables.

martes, 18 de septiembre de 2012

._.

Decepcionada de los dinosaurios robot y un cachivache oxidado. ¡Anonadada con los robots de corazones rotos!

(:

Aquí, incrédula de un rayito de sol que se me anda apareciendo entre las apretadas nubes de los últimos años.





lunes, 3 de septiembre de 2012

lunes, 27 de agosto de 2012

Algo que caliente mis pies, hoy que mis pasos son tan fríos.

Todos los días se me rompe algo diferente por dentro.
Y sí, la gente siempre habla, y sí, casi todo el tiempo me vale madres. Pero hay días como hoy en que no puedes creer que me afecte.
Es saber que la tranquilidad es itinerante y que mi ánimo no sube más allá de dos líneas bajo el promedio. 
Maldita memoria.
¿Por cuántas decepciones tiene uno que pasar para entender que la confianza en este mundo no es real?
Hasta parece que me he propuesto joderme la vida con quienes meto en ella.
Hasta parece que no ha sido suficiente.
Hasta parece que viene algo más grande, más feo, más como hace tiempo.
Es increíble como la pinche gente no le basta destruirte para seguir poniéndote piedras en el camino.

Gunait

"Es simpleza o necedad llorar, por lo que con llorar, no se puede remediar".
—Roger Garaudy

Solía no poder dormir; últimamente no quiero hacerlo. No hay noche en que no me turbe la pesadumbre de un sueño que no sé a veces distinguir de la realidad. Personas, escenarios, todo resulta confuso, tal como el día a día.
Malditos sueños y malditos significados.
Un día de estos se agotará mi paciencia.
Me recuerda a muchas cosas, errores, distancias, enigmas.
La gente viene y va, las nubes se vacían, los corazones se secan.
Orgullo y dignidad son dos conceptos que pueden, en ocasiones, ir de la mano, pero no por ello poseen el mismo significado.
No hay motivo real para esperar resultados, de ningún tipo, de nadie.
Malditos fantasmas. Malditos todos.

domingo, 5 de agosto de 2012

Mi creatividad anda por los suelos... Ríanse un rato con mi perfil PDA mientras alguna idiotez, que valga la pena, se cruza por mi cabeza para hacerme divagar.


Jessica M. es una pensadora meticulosa y exacta con un dinamismo innato para la solución de problemas. Es analítica y creativa y tiene una considerable curiosidad por las causas de los problemas. Jessica M. puede tener una amplia gama de intereses. Tiene un estilo, directo, lógico, preciso y sistemático en cuanto al enfoque y forma de alcanzar sus objetivos. Se preocupa por la perfección y no le gusta cometer fallas o errores. Le agradan las tareas desafiantes y pone énfasis en usar los hechos y la lógica para ocuparse de retos complejos, en respuesta a plazos difíciles.. Prefiere la novedad, las ideas imaginativas y el trabajo que involucre cambio y variedad. En ocasiones Jessica M. puede mostrarse introvertida. Puede trabajar como miembro de un equipo, pero tal vez se sienta mejor trabajando sola, de persona a persona y en grupos y equipos pequeños. Es intensa, impaciente y exigente al relacionarse con la gente. Mostrará impaciencia si cree que los otros no están haciendo el trabajo. Si bien se desempeña de acuerdo a las normas y los procedimientos, es muy independiente de los demás. Tiene una tendencia innata hacia la creatividad y se esmera por alcanzar la exactitud y la perfección. Jessica M. tiene un fuerte sentido de urgencia, sin embargo, al mismo tiempo, no quiere cometer ninguna falla o error. Al ser una persona directa y competitiva, buscará activamente tener el control en las situaciones en las que se encuentre. En general, le producirá cierta tensión tener que ceder el control o el poder en manos de otros. Posiblemente sienta como una pérdida de tiempo las conversaciones sociales "irrelevantes".

¿Qué tal?

sábado, 9 de junio de 2012

causa y efecto

Miro a través del cristal opacado por las inclemencias del ayer.
¿Qué puede ser más triste que un goteo apagado de esta lluvia al caer?
Más de una vez he presenciado el desgaste por los charcos que se han ido formando en el triste y olvidado pedernal de mi ser.
No olvides que yo no olvidaré, porque han sido una docena de ocasos los que me han observado callados.
En el reseco ardor de mis labios, la ronquera impaciente en el lamento titubeante de mi lejana voz errante, cuando me afero a una tenue luz, que pronto dejará de ser brillante.

domingo, 15 de abril de 2012

circo

"Carecer de las cosas que uno desea es condición indispensable de la felicidad"
—Bertrand Russell




Que desde mi ventana, oigo las voces en las que se dibujan esos vacíos llenos de memoria; que las luces me cuentan, una a una, esas historias marchitas con el paso de la luna; que las barreras se levantan conforme avanza una noche que equivale a un sinfín de días como hoy, en un antes que daba rienda suelta a la penumbra, en un rincón.

Que en el batir incesante de las horas, se inhabilita el resultado adverso de fraguar sin ton ni son, para girar en torno de la seda de tus pasos impíos y funestos. Que hacerse pedazos en el orden correcto del adiós sea un freno a lo enérgico que fue el viento en la cara cuando sólo estábamos los dos. Que la composición de un simple sueño, marca el ritmo de un mañana que jamás se asomó, sino en algunos párrafos de idilios característicos de mi impertinente corazón.

A primera vista y ejecutando el capricho, el agua helada hizo su función. En calidad de llanto, mi inconsciente te dijo adiós. Y cuando el frío deriva en decepción, no hay mano que arroje al viento venturanzas de un pasado que, vagando ociosa, me conduzca a vislumbrar los primeros rayos de un nuevo sol.

miércoles, 11 de abril de 2012

viendo mal

que me he cansado del berrinche eterno, de ser una princesita sin quererlo realmente.
que estoy harta de ser a veces una niña, a veces una anciana, pero nunca una mujer completa.
que no soporto ya, tragarme lo que siento y lo que pienso por sentir tanto miedo irracional.
que se me desbordan las emociones, porque sólo las guardo y no sé compartir nada con los demás.
que se me reviente la soledad en lágrimas para que la vida no me deje respirar, sólo de vez en cuando.
que me crea ilusiones que no me pertenecen, ni me corresponden, ni están en mis manos.
que dé por echo y confíe sin creer realmente.
que me anticipe a un final innecesario, para hacerlo realidad antes de que se me rompa algo.
que no deje que la gente entre realmente, porque si lo hacen, puede ser fantástico o pueden doler más de lo que se puede soportar.
que llamo la atención y cuando la tengo, no sé que hacer con ella y huyo, siempre huyo, porque no sé lidiar conmigo misma, porque cuando alguien te conoce realmente te puede lastimar.
que soy más perdedora de lo que la mayoría podría creer y por eso, casi siempre, logro alejar mejor en lugar de dejar que entren de verdad...

martes, 10 de abril de 2012

¿verdad?

... se te olvidó mencionar, que no importaría que yo estuviera ahí, eres tan cambiante como la luna y tan iracundo como el mar...

lunes, 9 de abril de 2012

nomás, por no dejar

"Cuando dos personas que se quieren chocan, no se mezclan: se rompen"
—André Breton

Déjame informarte que no eran necesarias tantas palabras para romperme el corazón.

Se me va la vida, un poquito más con cada parpadeo, se me va.

Tú no sabes lo que es amar, ¿a quién crees que engañas? Y me siento atada, porque siento que ando rondando tu cabeza, aunque sea de vez en cuando. Me pides que te deje ir, sin decírmelo realmente, pero eres tú el que me mantiene ahí, contigo.

Y qué triste, porque serás tú quien tenga que lidiar con una habitación vacía que te hablará de mí; serás tú quien pase por cada esquina y encuentre algo que le recuerde que estuve ahí, contigo. Serás tú quien escuche los ecos ahí atorados en tu casa, entre tus sábanas, en tu cuerpo, en tu alma. Serás tú quien escuche un "te amo" hueco en medio de la noche que no acaba, serás tú quien no pueda lidiar con la ventana sin cortinas. Serás tú quien no pueda con su conciencia, porque tú quisiste que te quisiera. Serás tú quien no consiga dejar de soñar con mis tonterías, porque fuiste tú quien así como si nada, me dejó en pedacitos de repente la vida.

Júzgame lo que quieras, pero de tus ataduras a las mías, mis nudos están más sencillos de deshacer, porque quiero, porque estoy aprendiendo a enfrentar el miedo que me ha dejado lisiada ante la belleza dinámica de la vida.

Que triste pretender darme la espalda y seguir mirando de reojo, y más triste aún que yo tan decidida a seguir caminando sin voltear la vista, se me olvide que jamás necesitamos los ojos para hablar, hasta que de repente, fue más el ruido imperceptible de tu miedo lo que imperó en medio de los días sin palabras que perdían el sentido.

¿Que me contaras cómo te ha ido? ¿Para qué? 

viernes, 6 de abril de 2012

Cinco de cuatro

Tipo el amor más grande, ese que nunca pasó.

Y juras tú, mi amor, que cuando me preguntas cómo estoy te he de contestar que me lleva el diablo, que te extraño como nunca he extrañado, que quiero abrazarte y sentir tus besos como antes, como cuando solía importarte; que no soy capaz de pensar en nada que no esté relacionado contigo.

Has de pensar que se me acabó la vida en tu arquetipo, que me desvivo tratando de arrancar tus huellas en mi piel, que tu aroma es necio y no se aleja de mis sentidos. Seguro querrás escuchar que mis latidos se mueren si no está tu pecho contra le mío y que no he olvidado todo lo que habíamos prometido.

Seguro crees que por las noches no puedo dormir, seguro crees que se me dificulta vivir sin todo a lo que sólo tú le dabas sentido. Seguro te has comprado la idea de que no puedo sonreír sin tu cariño, sin tu roce, sin tu amor, sin las madrugadas que me dejaban sin aliento en medio de un éxtasis casi sombrío.

Pensarás que para mí todo es insípido y te habrás comprado también la idea de que no sé andar si no es por tu camino; que me duele tenerte todo el tiempo en mi mente y que mi vida no es la misma desde que dejaste todo a la suerte. Que es llano mi vivir frente al recuerdo y que se me va la vida en esperar tu regreso. Que la hervencia es más viable ante embalumbrar mi corazón inseguro con esperanzas inocuas que destazan mis días, mis ayeres, mis mañanas, mis placeres.

Mis pensamientos pueriles me azogan, al punto de cercenar lo poco avanzado tras la luna oculta: debiste terminar de irte cuando el último haz de luz partió tras la bruma.

Fuiste brindis de un rato y me dejaste, en la cachada del despojo, a un corazón que simplemente, para tí, quiso darlo todo. Sólo puedo ya seducirte más allá de mis sueños, donde ni te enteras, ni te importa, ni te integras.

Y no, mi amor, no te diré lo que quieres escuchar, no hoy.

Y sí, mi amor, tu boca podrá decir lo que sea, pero tus ojos fijos revelan, con el aire fresco en la solapa de tu orgullo, que tus trincheras se caen, gritando en un aislado abrazo prolongado, en lo fútil del mundo al rededor, que todo en tí, me extraña tanto como yo a tí.

martes, 3 de abril de 2012

Basta

Así es, amigos míos. Otro "tres" al bolsillo del olvido y de lo que ya no tiene fundamento. Y tras 17 días de ausencia, aún me preguntan por él, y contestan mejor mis lágrimas que las palabras atoradas.
"No lo sé".
Que se me parta todo por dentro mientras no hallo la forma de comprender absolutamente nada.
Nosotros los que hemos estado más allá del sufrimiento, no queremos saber más de él de nuevo y parece, irónicamente, que disfrutamos su persecución absurda.
¿Dónde habrá quedado mi receta para los efectos secundarios de la miseria ajena?
Es que la sabiduría sólo calma a aquellos capaces de dominar su propio corazón. Nosotros los mortales inestables, nos pasamos la sabiduría por el arco del triunfo, no escuchamos cuando el volumen del dolor es más alto.
Supongo que es hora de abrazar de nuevo la soledad, esa que huye cuando el corazón late muy rápido y sudan las manos y uno se da cuenta que está enamorado.
Supongo que es hora de bajarle varias rayitas a mi drama.
Supongo que es hora de seguir adelante.

jueves, 29 de marzo de 2012

Simplifiquémonos la vida

Simplifiquémonos la vida.

Ser uno mismo es muy sencillo, supongo que lo difícil es serlo con el resto del mundo. 

Miren por ejemplo a mujercitas como yo, a quienes por todos lados nos andan diciendo "bonita", "guapa", "increíble". No me mal interpreten, soy agradecida en cuanto a los cumplidos y sin embargo, nunca alguien se para realmente a tratar de conocer lo que se encuentra debajo de una cara bonita.

Las chicas como yo saben mantener sonrisas, aún cuando por dentro se las esté llevando la chingada. Las chicas como yo no conseguimos trabajo tan fácil como podrían pensar ustedes, ya que podemos ser "conflictivas" (que despertamos pasiones, pues). Las chicas como yo deben escoger excepcionalmente bien a sus amigos, porque no sabes quién te quiere dar la mano y quién nomás te quiere coger.

Y cuéntenme, ¿quién, rara vez se ponen a pensar en que algunas odiamos ser etiquetadas como "guapitas"? Por que más allá de ser una ventaja, es una de esas cosas maldición/bendición que podemos usar para ser cabronas, sí, pero otra le sufrimos un poquito, pues hay quienes sólo se dedican a vernos bonitas, intocables y subirnos en un altar. Nos idealizan, nos ven perfectas para ustedes, pero sólo porque quieren pensar que es así. Porque al menor error, se les rompe su cuento en mil pedazos, pues nunca vieron a la persona real, sino a la que crearon en su mente.

Ustedes creen que a las niñas bonitas se les conquista diciéndoles que son bonitas y eso no funciona así. A las niñas bonitas se les conquista con detalles, con sentido del humor, con palabras inteligentes; con silencios que digan más de lo que la boca pueda expresar, con momentos breves que signifiquen todo. A las chicas como yo, no nos importa un abdomen sin six pack, ni un peinado "arruinado" por el que escurre el gel a causa de la lluvia; no nos importa apretar la agenda, perdernos un concierto, dejar de hacernos un tatuaje; no nos importa su pasado, ni quién estuvo antes, ni quién podría estar ahora; no nos importa el frío, ni la imperfección de una nariz rota, ni una ligera separación de dientes. A las chicas como yo, nos dejan sin habla las miradas profundas que desnudan el alma, nos eriza la piel un leve roce sin malas intenciones y nos prenden también las sucias intenciones de aquél a quien amamos; nos gusta que nos seduzcan, pero también nos gusta seducir. A las mujeres como yo, nos gusta sentirnos deseadas, pero no por una cara, ni por un cuerpo, sino por el paquete completo, por que somos torpes, melancólicas, inteligentes, bondadosas, nobles, indecisas, desesperadas, soñadoras, inquietas, perfeccionistas, ambiciosas, amorosas, desquiciantes, berrinchudas, impacientes, impulsivas, aterradoras, solidarias... por lo bueno y lo malo, no sólo por lo que está a la mano.

Las personas somos un escritorio con un montón de íconos desordenados. De vez en cuando, logramos ordenarnos, pero todo el tiempo añadimos y borramos. La desventaja es que no tenemos la eficiencia automatizada de un desgragmentador. Y no nos pueden pedir más de lo que somos capaces de dar. Y no daremos lo que ustedes quieren, sólo porque sí.

A las chicas como yo, nos cuesta abrirnos, nos cuesta decir lo que pensamos y más lo que sentimos. A veces sólo queremos escuchar, a veces sólo queremos guardar silencio y contemplar lo maravillosos que son ustedes para nosotras, tratar de entender que eso está pasando realmente, que no es producto de la imaginación o de un sueño. No somos periquitos todo el tiempo, sólo a veces, nos cansamos de hablar porque escuchar su voz, sus tonterías, sus pensamientos, nos resulta importante, lo atesoramos y lo guardamos ahí, donde quede intacto para el resto del mundo, donde sólo sea nuestro.

Las chicas como yo lloramos fácilmente. Lloramos por todo. Si lo que alguien me dijo es cierto, supongo que hablamos con el corazón en la mano, casi todo el tiempo.

Las chicas como yo, odiamos que nos comparen, odiamos que nos digan "eres perfecta para mí", odiamos que nos digan "eres mejor que...", cuando a mitad de empezar el camino, ya nos están botando por no cumplir expectativas que ni siquiera nos corresponden. Las chicas como yo, nos rompemos fácilmente, pero como somos fuertes, pues tenemos que seguirlo siendo. Las chicas como yo, creemos  y si entregamos, lo hacemos de corazón, sinceramente y porque vamos por todo. A las chicas como yo, nos rompen el corazón una y otra vez y casi siempre preferimos pensar que fue nuestra culpa, porque no somos capaces de creer que alguien haga daño con intención.

Las chicas como yo, odiamos el amor al caparazón. A las chicas como yo, se nos conquista principalmente escuchándonos, y no admirándonos. A las chicas como yo, ustedes no nos permiten meter la pata, porque "siendo tan bonitas, pues son increíbles y tan maravillosas". El día que me digan "eres tan humana y te amo por tus defectos, porque así puedo apreciar mejor tus virtudes". Cuando ese día llegue...

A mí no me vengan con frases baratas, que ya no me las trago. A mí no me vengan con pretextos de secundaria, ni con mitos urbanos. A mí no me vengan con esos "para siempre" de un par de días, ni esos "te amo" que solo arden como la cera bajo las mechas encendidas. A mi no me vengan con promesas cuya garantía sólo sea válida en los sueños, ni me vengan con palabras que crean que me llenan y realmente van abriendo brechas. A mí no me vengan con vacíos disfrazados, que para vacíos, ya tengo por ahí un par de vasos.

Así que simplifiquémonos la vida. La próxima vez que veas a una chica linda, sé tú mismo y permítete conocer a la verdadera chica, sin pensar en lo guapa que es, ni en tus expectativas, ni en lo perfecta que debe ser. Será un favor mutuo que, con algo más que suerte, podría sorprenderte.

martes, 3 de enero de 2012

después

Es la distancia en tu presencia lo que me tiene insegura. Es el saber que detrás de un susurro, hay un nombre que al mío no corresponde. Mirar, hablar, tocar, pensar, nada de eso es suficiente cuando se quiere querer y no se siente el querer. ¿Y qué? Me quedo estancada en un sueño que no doy por algo real, pues del otro lado, todo se convierte en esbozos con un pulso dubitativo y una voluntad lejana.
Me dices cosas desde dónde no puedo visualizar en tu rostro lo que esconden tus palabras escogidas, esas que confunden lo que dices con lo que interpreto. Desde aquí no soy capaz de preguntar, porque a la vez preferiría una mentira que no me haga ver lo que puedo tomar por verdad.
¡Ay, mi mala costumbre de esperar lo peor y a veces hasta desearlo!
Ahí, mi mala costumbre de caminar de la mano de lo que probablemente me hará daño...